domingo, 22 de enero de 2012

Miopía subjetiva



Mientras pierdes el tiempo divagando en cada uno de tus desaciertos, yo encuentro perfectos los vicios de tu lenguaje y hasta aquellos detalles que consiguen infravalorarte: tú los llamas defectos y para mí son algo tan tuyo y tan de ti, como tus virtudes. 

Y puedes alegar en mi contra toda la miopía subjetiva que quieras, pero desde aquí, desde donde estoy sentada, veo nítidamente y en alta definición que, si para mí fue un acierto el encontrarte, los únicos desaciertos que podemos escrutar ahora son los de aquellos que aún no pidieron cita con mi oftalmólogo. 

Mientras tanto, siempre puedo prestar mis sucias gafas empañadas a quien lo necesite.

Foto: Starry-Liz

6 comentarios:

  1. Hay defectos que no van al oculista porque no quieren creer que en realidad son virtudes

    ResponderEliminar
  2. siempre habrá alguien que les preste sus gafas ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Las virtudes aceptarian las gafas solo para compartir su pequeño secreto con el dueñ@ de las mismas, el miope subjetivo. Ese es el unico motivo y la unica circunstancia válida que se me ocurre.

      Eliminar
  3. La miopía subjetiva es la excusa que alegamos en contra de alguien cuando trata de hacernos ver algo que nosotros mismos no somos capaces de alcanzar. Persona que se sorprende de que si él lo ve tan claro desde donde está sentad@, ¿por qué no será capaz de verlo esa misma persona?. Es el que conoce el secreto y su misión será la de transmitirle con detalle su perspectiva, con intentos en vano, como el de esta entrada.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Quizá no sea una cuestión de oftalmólogo, sino de otorrinolaringólogo.

      Eliminar

No olvides firmar tu comentario: